Maurits Cornelis, Escher, artista holandés, destacó por sus creacciones en las que representaba figuras imposibles, espacios paradójicos y mundos imaginarios.
Entre sus obras encontramos la cascada, en la que se representa una imposible corriente de agua forzada:
Evidentemente es un efecto óptico que se puede deber al engaño de pensar en tres dimensiones mientras estamos observando una imagen bidimensional.
Menos mal que siempre hay personas imaginativas, como McWolles, que ha construido un modelo real basado en la celebre ilustracion, ha echado agua y aparentemente ha conseguido lo que parecía imposible:
Fuente: Todo interesante
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